¿Nuestro cerebro necesita azúcar?

Seguro que habrás oído en muchas ocasiones que no hay que dejar el azúcar blanco porque nuestro cerebro necesita azúcar constantemente. Debemos matizarla, y bastante. Lo que necesita nuestro cerebro es glucosa, y no solamente el cerebro, sino que todas las células de nuestro organismo se alimentan de glucosa. Aunque es cierto que las neuronas [células del cerebro], casi se alimentan exclusivamente de este compuesto.

La cuestión es saber elegir las fuentes de glucosa. Hay multitud de alimentos que de forma natural la contienen como frutas, cereales integrales, legumbres, verduras, frutos secos, semillas… es decir, está presente en cualquier dieta saludable. La industria nos ha vendido que hay que consumir productos con azúcar añadido para alimentar a nuestro cerebro como bollería, galletas… cuando podemos cuidar mejor nuestra salud sin azúcares añadidos.

Estos últimos serían los que llamamos azúcares libres, los que se añaden en las elaboraciones, los que están presentes en un cruasán, pero también la cucharadita que ponemos en el café. Desde hace años la Organización Mundial de la Salud está advirtiendo que hay que reducir estos azúcares añadidos al mínimo, y que en todo caso no debería suponer más del 5% de las calorías ingeridas. Lo mejor, eliminar por completo estos azúcares libres, aunque es complicado porque están por todas partes.

Nuestro cerebro en algunas ocasiones nos juega malas pasadas, le gusta ir por la vía rápida y si obtener la glucosa de forma sencilla, y la más sencilla son los hidratos simples [azúcar blanco, bollería…], pero no la más saludable, ya que estresan a nuestro sistema nervioso, saturan nuestro hígado, aumentan el riesgo de diabetes y colesterol, etc.

Si alguien te dice que hay que tomar azúcar porque es fundamental para nuestro cerebro, respóndele que lo que necesita es glucosa y que la mejor forma de obtenerla es a través de los alimentos naturales que acabamos de ver: cereales integrales, legumbres, frutas, verduras…