Nutrientes 100 g: 16 calorías, grasas 0,1 g [gasas saturadas 0 g, grasas insaturadas 0 g], hidratos de carbono 3,6 g, fibra 0,5 g, azúcares 1,7 g, proteínas 0,7 g, colesterol 0 mg, sodio 2 mg, potasio 147 mg, calcio 16 mg, magnesio 13 mg, vitamina A 105 IU
Origen
Su cultivo comenzó en la India hace unos 3.000 años. Aparece recogido en un texto sagrado indio del I milenio a. C. con el nombre de uruaru. Tardaría en llegar al Mediterráneo, lo haría en los siglos VI-VII d. C. a través de Turquía. Carlomagno [s. VIII], como hizo con otras muchas hortalizas, redacta cómo debe hacerse su cultivo.
Propiedades
Por su contenido en vitamina A y vitamina E resulta efectivo para la salud e hidratación de nuestra piel. También por el gran volumen de agua en su composición. Esto unido a su aporte de vitamina C lo hace ideal contra el envejecimiento celular.
Es un alimento muy alcalino que nos ayuda a equilibrar el pH de nuestro organismo aumentando nuestras defensas y nuestra protección frente a diferentes agentes externos agresivos.
Su vitamina K tiene propiedades antiinflamatorias, recomendado contra la artritis. Su manganeso colabora en la buena salud de nuestros huesos. Gracias a su sílice también favorece el fortalecimiento de nuestras uñas y nuestro cabello. Podemos aplicarlo directamente sobre la piel para evitar la dermatitis o la psoriasis, pero también las manchas o el acné. Además, el pepino es uno de los alimentos que más ayuda a evitar la retención de líquidos.