La gastritis responde a una inflamación de la mucosa gástrica de nuestro estómago. Puede ser un fenómeno puntual, pasajero o puede convertirse en crónica, durante meses o años. Se manifiesta con dolor estomacal, pudiendo aparecer vómitos, náuseas o falta de apetito. Las causas pueden ser múltiples: desde la ingesta de medicamentos, al reflujo biliar, algún tipo de virus, consumo de drogas, tabaco o alcohol, etc.

Alimentos/remedios aconsejables

El regaliz en polvo es indicado en gastritis y úlceras estomacales. No deberíamos sobrepasar 1 gramo por cada toma, máximo 2 tomas al día, ni tomarlo durante más de 1 semana seguida. Tampoco es recomendable en diabéticos ni embarazadas.

El tomillo también resulta útil en esta dolencia, especialmente en la gastritis crónica. Podemos tomar una infusión con una cucharada por cada taza de agua recién hervida. Le podemos añadir 1 cucharadita de manzanilla y dejamos reposar 5-6 minutos. Podemos tomar 2 infusiones al día pero no está recomendada en hipertensos.

Entre los alimentos que actúan como protectores de la mucosa gástrica encontramos la calabaza, el centeno, la cúrcuma, el laurel, el mango, el membrillo [la fruta, no el dulce], la papaya y la zanahoria.

Durante los procesos de gastritis aguda deberemos eliminar cualquier tipo de picante, alcohol y tabaco. Deberemos vigilar también nuestro estrés ya que es una de las causas principales de esta dolencia, esto de ‘los nervios se me agarran al estómago’ puede desembocar en una gastritis crónica.