Nutrientes 100 g: 329 calorías, grasas 0,5 g [gasas saturadas 0,2 g, grasas insaturadas 0,1 g], hidratos de carbono 63,2 g, fibra 13 g, azúcares 2,3 g, proteínas 20,6 g, colesterol 0 mg, sodio 5,1 mg, potasio 1.254 mg, calcio 66,2 mg, hierro 5 mg, magnesio 127 mg
Origen
En primer lugar fue cultivado en el Himalaya y, después, en China y Corea alrededor del 1.000 a. C. Más tarde desembarcaría después en Japón para convertirse en la legumbre más popular del país. Algunos lo consideran como el origen de su país, como el alimento que les dio fuerza para construir una ‘gran nación’.
Propiedades
Similar a las judías/alubias pero con un tamaño inferior, tiene un color entre rojizo y granate con forma de riñón. Precisamente es considerado el alimento de los riñones, ayudando al mismo en sus tareas, fortaleciéndolo, colaborando en sus labores de limpieza sanguínea, evitando la aparición de cálculos renales, etc. Además, facilita la digestión, especialmente de las grasas, y refuerza nuestra flora intestinal.
Por la importante presencia de tiamina, es útil para eliminar toxinas ingeridas a través de otros alimentos, ayuda a nuestro hígado en sus labores de desintoxificación, protege el sistema cardiovascular y regula nuestro sistema nervioso por sus vitaminas del grupo B.
También nos ayuda a controlar el azúcar en sangre por su fibra y su bajísimo índice glucémico, sus hidratos son complejos, de los saludables.