Nutrientes 100 g: 573 calorías, grasas 50 g [gasas saturadas 7 g, grasas insaturadas 41 g], hidratos de carbono 23 g, fibra 12 g, azúcares 0,3 g, proteínas 18 g, colesterol 0 mg, sodio 11 mg, potasio 468 mg, calcio 975 mg, hierro 15 mg, magnesio 351 mg, fósforo 629 mg
Origen
El sésamo es originario de la India y Oriente Medio, de donde pasó al norte del África, especialmente Marruecos, Túnez y Egipto desembocando en todo el Mediterráneo, de ahí que se la conozca como ‘ajonjolí’ palabra árabe. Llegó a América a través de los esclavos que lo usaban como espesante de sopas y caldos.
Propiedades
Las semillas de sésamo son altamente nutritivas y al igual que las de lino poseen una enorme cantidad de minerales, especialmente calcio, fósforo, hierro y magnesio. Precisamente por la presencia de estos minerales resultan un buen preventivo contra la osteoporosis, colaborando en la fijación del calcio en los huesos.
Recomendadas en procesos depresivos, de estrés, ansiedad, ayudan a conciliar el sueño por su contenido en triptófano y tiamina.
Son eficaces en problemas del sistema respiratorio, especialmente en la eliminación del exceso de mucosidad por la presencia de riboflavina en su composición. Por su alto contenido en vitamina E ayuda a nuestra piel contra el envejecimiento prematuro y a mantenerla hidratarla. Por sus ácidos grasos poliinsaturadas ayuda a mantener los niveles de colesterol en buenos niveles, protegiendo nuestras arterias frente a la formación de ateromas. Como el resto de semillas, deben consumirse molidas.