La quinoa (Chenopodium quinoa) se ha convertido en los últimos años en un alimento habitual en muchos hogares. Y es que comenzó siendo un recurso exótico en Europa, pero cada vez se ha convertido más en algo sumamente popular por su versatilidad en la cocina y excelentes propiedades nutricionales.
La quinoa no es más que una semilla, pero con características nutricionales únicas al poder consumirse como un cereal, por eso, la llamamos también pseudocereal.
Nutrientes de la quinoa
La mayor parte de calorías de la quinoa provienen en forma de hidratos complejos, pero también aporta cerca de 16 gramos de proteínas por cada 100 gramos y ofrece alrededor de 6 gramos de grasas en igual cantidad de alimento. ¡Una auténtica maravilla nutricional!
Asimismo, debemos destacar su alto aporte de fibra dietética, ya que puede alcanzar los 15 gramos por cada 100 gramos, siendo en su mayoría, fibra de tipo insoluble como poseen característicamente las semillas.
Por su alto contenido en fibra y su mayor aporte proteico respecto a los cereales, la quinoa tiene un bajo índice glucémico, lo que la vuelve ideal para personas con diabetes. Además de ser hidratos saludables que tienen una absorción lenta en el organismo para población general.
La quinoa también contribuye a combatir el estreñimiento dado su alto contenido de fibra insoluble, y puede ser de gran utilidad en la dieta de personas veganas y vegetarianas, ya que posee una elevada proporción de proteínas completas y es buena fuente de hierro.
Vitaminas y minerales de la quinoa
Si nos referimos a los micronutrientes, en la quinoa destaca el contenido de potasio, magnesio, calcio, fósforo, hierro y zinc entre el grupo de los minerales.
La quinoa también ofrece vitaminas del complejo B en cantidades apreciables, útiles para el sistema nervioso, y vitamina E con función antioxidante, sobre todo protegiendo nuestra piel.
El tema medioambiental es su fallo
El único «pero» que podemos sacarle a la quinoa es su impacto medioambiental, ya que hasta que llega a España recorre miles de kilómetros. Esto empeora notablemente su valoración relativa a cuestiones de sostenibilidad.
Sin embargo, también es cierto que cada vez hay más producción nacional en el Valle del Guadalquivir, zona de Andalucía, por lo que este aspecto está siendo mejorado poco a poco. Similares nutricionalmente a la quinoa encontramos muchas legumbres y la mayoría de granos integrales. Es decir, la quinoa no es de consumo obligatorio, aunque sí muy nutritiva y recomendable por lo general.
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