El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa que afecta principalmente a la memoria y al funcionamiento cognitivo. A medida que la población envejece, la prevención de esta enfermedad se vuelve cada vez más importante. Se ha descubierto que el omega-3, un tipo de ácido graso esencial, puede desempeñar un papel crucial en la protección y prevención del Alzheimer. Varios estudios científicos respaldan esta afirmación:
- Un estudio publicado en el Journal of Alzheimer’s Disease encontró que los niveles bajos de ácidos grasos omega-3 en el cerebro están asociados con un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer. Los participantes con niveles más altos de omega-3 presentaron un menor riesgo de deterioro cognitivo.
- Otra investigación, publicada en el Journal of Nutrition, Health & Aging, reveló que los suplementos de omega-3 pueden mejorar la función cognitiva en personas mayores con riesgo de desarrollar demencia.
- Un estudio longitudinal realizado en la Universidad de California en Los Ángeles mostró que las personas que consumían alimentos ricos en omega-3 tenían una menor acumulación de placas amiloides en el cerebro, un sello distintivo del Alzheimer.
- Un metaanálisis de múltiples estudios publicado en el Journal of Alzheimer’s Disease encontró una asociación positiva entre el consumo de pescado, una fuente importante de omega-3, y un menor riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer.
Si no comes pescado, se recomienda la suplementación de Omega-3. Esto es así, porque el que encontramos en frutos secos y semillas, tiene muy poca conversión en DHA, que es el que mejor aprovecha el ser humano.
Por toda esta información, me animé a sacar mi suplemento de Omega-3 DHA: vegvital.com
